Instintos laborales

«Lo malo de los que se creen en posesión de la verdad

es que cuando tienen que demostrarlo no aciertan ni una».

Camilo José Cela

1. No me gusta perder ni al parchís

08.30. ¿Arrogante yo? ¿Pero esta tía qué dice? ¿Por qué me grita como una energúmena desde el coche? Porque a ver, si no es capaz de conducir ligerita, yo no tengo la culpa. Por tías como ésta tenemos atascos en Madrid. Estoy harto de verdad. Encima que llego tarde, me voy estresado. Espero que el cliente no me lo note.

10.45. ¡Pues no me ha ido tan mal! El cliente me miraba fijamente a ver si le bajaba el precio pero reconozco una vez más que he estado brillante. Menos mal que no ha intervenido Paco, el jefe de zona, o la pifia. No sé cómo explicarles que ante un acuerdo lo ideal ...