Capítulo 6. Fraude con tarjetas de crédito robadas

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Él reparte las cartas... y los que juega nunca sospechan...

Sting1

La primera víctima de fraude que Gilit conoció fue su padre. Hombre cuidadoso, comprobaba regularmente los extractos de sus tarjetas de crédito. Un buen día se sorprendió al ver que había comprado productos en Ucrania y había acumulado cargos en varios vendedores de juegos online. Al principio se sorprendió: no entendía cómo era posible el robo, ya que la tarjeta seguía en su cartera y nunca la había utilizado en Internet. Pero luego se divirtió: el banco que emitió la tarjeta le aseguró que no pagaría la factura de ninguna de estas actividades, y disfrutó imaginándose a sí mismo vagando por Kiev.

Este tipo de introducción al fraude no es inusual, y Shoshana tiene historias similares que contar a partir de las experiencias de sus familiares y amigos. El fraude con tarjetas de crédito robadas es la forma de fraude que los consumidores habituales conocen con mayor probabilidad, por experiencia personal o por la de un amigo o familiar. Por desgracia, incluso ataques bastante básicos como éste consiguen pasar desapercibidos de vez en cuando.

Los ataques más ajustados a los hábitos de compra de la víctima también entran en esta categoría de fraude y son más difíciles de detener. En ambos casos, el consumidor puede tardar en darse cuenta de que hay un ...

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