Es absurdo hablar si no se tiene algo coherente que decir.

Mucha gente habla, nunca mejor dicho, por hablar.

El no tener en realidad nada que decir no parece desanimarlos.

A pesar de no tener una opinión o un razonamiento fundamentado, deciden hablar.

Harry G. Frankfurt, profesor de la Universidad de Princeton, lo explica así: «El generador de chorradas de una persona se activa cuando las obligaciones u oportunidades de hablar sobre un tema determinado son mayores que sus conocimientos relevantes sobre el mismo».

Dicho llanamente, no tienen ...

Get El libro del Smart Thinking now with the O’Reilly learning platform.

O’Reilly members experience books, live events, courses curated by job role, and more from O’Reilly and nearly 200 top publishers.