Un equipo fuerte y con visión
La creación de las primeras áreas de responsabilidad social corporativa y su formalización en los organigramas se sitúa en torno al año 2000. Por entonces no existía la formación específica en esta materia. Los pioneros fueron personas especializadas en gestión de marca, dirección por valores, identidad y cultura corporativa, comunicación interna y, en ocasiones, recursos humanos. Otro germen importante lo constituyeron las fundaciones de empresa, que empezaron a poner un pie dentro de la organización para implicar a sus empleados en la acción social y después fueron ampliando competencias.
Las razones por las que la alta dirección o la propiedad de una empresa deciden abordar el tema no suelen darse a conocer ...
