Capítulo 12. El poder conlleva responsabilidad
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En los capítulos anteriores, vimos cómo aprovechar la psicología para construir productos y experiencias más intuitivos y centrados en el ser humano. Identificamos y exploramos algunos principios clave de la psicología que pueden utilizarse como guía para diseñar según cómo son realmente las personas, en lugar de obligarlas a ajustarse a la tecnología. Este conocimiento puede ser muy poderoso para los diseñadores, pero el poder conlleva responsabilidad. Aunque no hay nada inherentemente malo en aprovechar los conocimientos de la psicología conductual y cognitiva para ayudar a crear mejores diseños, es fundamental que consideremos cómo los productos y servicios tienen el potencial de socavar las metas y objetivos de las personas que los utilizan, por qué la responsabilidad es fundamental para quienes crean esos productos y servicios, y cómo podemos frenar y ser más intencionados.
Cómo la tecnología moldea el comportamiento
El primer paso para tomar decisiones de diseño más responsables es reconocer y comprender las formas en que la mente humana es susceptible a la tecnología persuasiva y cómo se puede moldear el comportamiento. Hay una serie de estudios que permiten vislumbrar los fundamentos de la formación de la conducta, pero quizá ninguno sea tan influyente o fundacional como los realizados por el psicólogo, conductista, ...